Para el día de la Virgen del Carmen, patrona de los conductores, Goodyear le trae varias recomendaciones para evitar percances durante sus viajes por las carreteras del país.
La llanta es, indiscutiblemente, uno de los elementos más importantes de los camiones o buses. Cualquier contrariedad con alguna de ellas puede significar un retraso en su viaje,
la de sus pasajeros o en la entrega de la carga. Por eso es un componente que merece cuidados especiales y un mantenimiento constante para tener un viaje sin contratiempos y ahorrar costos.
Está comprobado que mientras más organizado y preocupado con el negocio es el transportador, mayor será la atención que le pondrá a las llantas de su vehículo. Por esta razón Goodyear ofrece algunos consejos para tener en cuenta y viajar tranquilo mientras reduce sus costos del kilómetro rodado.
1. La presión de la llanta
La presión de inflado es el factor más importante para el rendimiento y durabilidad de la llanta. Un mejor aprovechamiento de la vida total de ésta depende de la calibración de la presión de inflado. La experiencia ha demostrado que de cada 100 neumáticos inutilizados, 80 de ellos salieron del servicio debido a una presión de inflado incorrecta. La presión baja genera deflexión excesiva de la llanta y provoca: alto desgaste, rupturas circunferenciales en el área de la pestaña, aumento en el consumo de combustible y baja durabilidad de la llanta, entre otras.
Por su parte, la presión alta produce tensiones excesivas y anormales en la carcasa, pues el neumático se vuelve rígido por la presión y la carcasa pierde su capacidad de flexión, dejando de amortiguar los impactos, causando rupturas y daños con mayor facilidad. Es importante evitar la falta de atención que compromete la preservación de la carcasa para futuros rencauches y aumenta el costo por kilómetro recorrido, ya que de esta manera se disminuye la vida útil de la llanta.
Por eso Goodyear le recomienda:
- Inflar las llantas con la presión recomendada siempre en frío
- Verifique la presión de los neumáticos como mínimo una vez por semana
- Utilice un manómetro confiable, ajustado periódicamente
- Utilice tapas metálicas en las válvulas
- En el montaje doble, la válvula de la llanta interna deberá tener una longitud adecuada para que quede accesible con facilidad. Si es necesario, se recomienda el uso de extensiones, el compresor debe ser drenado periódicamente.
- Use la presión en función de las cargas
2. La “purga”
La purga es una expresión común que explica el hecho
de sacar aire de la llanta cuando ésta se encuentra aún caliente. Es frecuente ver en las carreteras del país que, inmediatamente después de una parada para descansar o comer, algunos conductores revisan la presión de las llantas, todavía calientes, y al encontrar una presión mayor a la que había al inicio del viaje, “purgan” la llanta; es decir, le quitan aire. Goodyear le recomienda no hacerlo. Es importante entender que la velocidad y la flexión constante de la llanta generan calor y consecuentemente aumentan la presión de la llanta al girar, cuando la llanta se enfría, vuelve a la presión con la que inicialmente fue inflada. Normalmente, la llanta necesita de dos a tres horas para enfriarse.
De este modo, sacarle aire a una llanta caliente es provocar una inadecuada presión y consecuencias que afectan el rendimiento y la durabilidad de la llanta. La mejor manera de evitar la “purga” es calibrar las llantas cuando estén frías antes de iniciar el viaje.
3. Consejos prácticos
Para tener un viaje ameno, sin contratiempos es importante que descanse lo suficiente antes del viaje. El sueño es una de las causas más comunes de los accidentes en carretera. Así mismo, aproveche las paradas que haga para tomar una siesta de 15 minutos. Nunca duerma más de 30 minutos pues se va a levantar más cansado.
Realice comidas livianas en los restaurantes, comer muy pesado produce sueño y cansancio. Y por último, nunca ingiera bebidas alcohólicas antes o durante el recorrido que vaya a hacer. Conduzca con confianza, Goodyear lo estará acompañando durante todo el camino.
