Con ahorros superiores a 30 mil millones de pesos frente al uso de combustibles diésel, reducción de 80.000 toneladas de CO2 y 1.634 toneladas de NOX, Vanti logró el premio a la Eficiencia Energética otorgado por Andesco, en su edición 2021, con el Proyecto Transmilenio.
Vanti: Premio a la Eficiencia Energética de Andesco
La Asociación Nacional de Empresas de Servicios Públicos y Comunicaciones, Andesco, realizó la séptima versión del premio de Eficiencia Energética en el que Vanti resultó ganadora en la categoría de Empresas de Servicios Públicos y Tecnologías de la Información y las Comunicaciones, gracias al Proyecto Transmilenio, enfocado en el uso de combustibles limpios con el Gas Natural Vehicular, GNV, en articulados y biarticulados Scania Euro VI.
En la convocatoria se presentaron 59 proyectos para cuatro categorías, dando muestra de la relevancia por parte de la industria respecto a la protección medioambiental. En total, los proyectos invirtieron 14 mil millones de pesos, enfocados en buenas prácticas para el cuidado del medio ambiente.

“Premiar las transformaciones y el espíritu emprendedor es un elemento clave para lograr un ecosistema que incentive y promueva la eficiencia energética. En estos años he observado cómo Colombia está en ese camino, he evaluado proyectos transformadores con acciones que logran cambiar los distintos sectores productivos, que permiten una mayor eficiencia”, comentó Alfonso Blanco, secretario ejecutivo de la Organización Latinoamericana de Energía, jurado del premio otorgado por Andesco.
Movilidad sostenible: Proyecto Transmilenio
Transmilenio es uno de los sistemas BRT más robustos y demandantes del mundo, su continua modernización es clave para una óptima operación. Pensando en ello Vanti, en conjunto con la cadena del gas del país, comenzó en el 2016 un proyecto que marcó un nuevo rumbo para el sistema. En aquel año llegaría el primer biarticulado BRT Euro VI GNV del mundo al país, desde ese momento se inició un mapa de ruta que ha tenido excelentes resultados.
“Con una oferta en conjunto con Scania, fabricante de los buses, se inició el Proyecto Transmilenio en 2016. En aquel momento se homologó el biarticulado en Colombia, con un diseño óptimo para las condiciones de la ciudad (Bogotá). Se realizó un trabajo con todos los aliados de la cadena en el que participaron Ecopetrol, TGI, Vanti y Scania. El objetivo era estructurar una propuesta sólida y competitiva para el mercado”, nos comenta John Ladino, director de movilidad en Vanti.
La meta de Vanti fue la de configurar una oferta en la que existiera un balance entre sostenibilidad medioambiental y sostenibilidad financiera, y lo lograron. Con el hito del primer biarticulado Euro VI con motor dedicado a gas natural, se inició un proceso que desembocó en la adjudicación de 741 buses troncales GNV, los cuales representaron el 52% de la licitación de la renovación de buses de la Fase I de Transmilenio.
A partir de ahí comenzó un nuevo viaje para Vanti y el equipo de aliados de la cadena de gas: un proceso de diseño y estructuración de infraestructura para el suministro del gas en los portales de Transmilenio, un gran reto si se tiene en cuenta que aquellos portales fueron diseñados para el uso del diésel. Sin embargo, y a pesar de las dificultades, el proyecto salió adelante. A la fecha se han construido seis estaciones de suministro en patios troncales y tres más para buses del SITP.
“En el programa troncal se invirtieron más de 52 mil millones de pesos y fue ahí donde todos los retos que se pensaban imposibles para un sistema de transporte masivo como Transmilenio, se volvieron una realidad. En junio de 2019 comenzaron a operar los primeros buses y a cierre del 2020 tuvimos las 741 unidades operando, junto a 518 autobuses de 12 mts para el SITP”, recalca Ladino.
A cierre de 2020 Vanti suministró 41 millones de mt3 de gas natural vehicular para la operación de Transmilenio, cifra que equivale a unos ahorros superiores a 30 mil millones de pesos en combustible, frente al diésel, lo que demuestra que el GNV era y es la alternativa más sostenible en aspectos sociales, ambientales y económicos.
Resultados que enmarcan el premio de Eficiencia Energética

El impacto positivo del GNV en el sistema Transmilenio ha sido motivo de estudios por parte de múltiples entidades y universidades. Uno de los más relevantes fue el realizado por la Universidad de los Andes en el que se destaca la disminución de emisiones contaminantes dentro de buses y estaciones, en comparación con las unidades Euro III que rodaban previo a la renovación.
“Cuando iniciaron los análisis en el 2015 había una exposición de 187 microgramos por m3. En 2017 el análisis arrojó una cifra de 176 microgramos por m3. Dejando esa línea base, se hicieron dos mediciones posteriormente: una en 2019 y otra en 2020. En 2019, con la entrada en operación de la primera parte de la flota, los niveles bajaron al 50%. En el último estudio, al tener el 100% de la flota nueva, se mostró una reducción de emisiones en un 78% en el componente troncal”, indica Ladino.
Las cifras fueron impactantes. Bajo evaluaciones técnicas se ha podido comprobar beneficios económicos, sociales y ambientales con el Proyecto Transmilenio. Respecto al consumo de energía y en comparación con unidades diésel, para el cierre de 2020 se ahorraron más de 51.800 megavatios hora; la reducción de emisiones de CO2 fue de 80.000 toneladas; respecto al material particulado, la disminución fue de 4 toneladas, es decir, el 100% de todas las emisiones; el impacto también ha sido muy positivo en NOX, dejando de emitir 1.634 toneladas de aquel material y más de 1.200 toneladas de monóxido de carbono.
El reconocimiento de Andesco para Vanti y la cadena de gas en Colombia, es una muestra de las grandes transformaciones que se realizan en materia de movilidad en el país. A futuro se espera una mayor incursión en modelos de transporte como el SITP y en el caso de transporte de carga, las proyecciones son muy positivas gracias a la participación de múltiples marcas de camiones en el mercado nacional, como la inversión de la cadena en el suministro.
“Este es el resultado de un trabajo en equipo donde los operadores de Transmilenio tomaron la decisión de operar con GNV; y los actores de la cadena, caso de Ecopetrol y TGI, se involucraron a fondo. La estructura del proyecto fue un trabajo compartido, en el que Scania tuvo una relevancia muy grande. Estamos muy felices por el resultado”, concluye John Ladino, director de movilidad en Vanti.